viernes, 4 de diciembre de 2015

NUEVA EXPOSICIÓN DEL ARTISTA ÁLVARO CHÁVARRI COLÓN DE CARVAJAL

El artista en el Instituto Cervantes de Belgrado


https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHIFaHbEoTJYsIq32PG06oew0EpF1EWVb8G0g2v8_aFrpQJIqWHN0itFRVnXw-r69ClewYWXaF29Ylc8sFRyVoIrbNNjJgbvN9Pn3WVfBVKroIDsnng_gFQIj_O3uxxv-d05egUQpeQYw/s1600/Chavarri+2.jpg
Una obra de la exposición en Sotogrande de 2008
                                                                                 
Expo. en la c) Bárbara de Braganza 4 .  De diciembre 2009 a febrero 2010
                                                                           
 Álvaro Chávarri vive y trabaja actualmente en Madrid pero su obra creo sigue teniendo esa impronta que resalté en el artículo que sobre el artista publiqué en 2011 y que reproduzco a continuación:

La obra de arte es, para nosotros, sobre todo impacto, impresión, sentimiento de algo que puede llegar a sobrecogernos y ante todo belleza, estética, aunque en algún caso pueda estar recóndita y haya que buscarla entre la hojarasca de la vida. Como las carabelas de su antepasado surcaban las aguas de la mar océana buscando nuevos continentes, culturas diferentes en suma a las entonces conocidas, así la obra de Álvaro Chávarri Colón (Madrid 1944), directo descendiente del Almirante, también surca por la vida buscando nuevas sendas para el arte. Para ello utiliza el collage (“old fashion”) junto con la fotografía (niña mazai, guerrero mazai… ) anexa a grafías y a retazos de saris indúes, tejidos africanos, monedas…, producto, todo ello, de sus numerosos viajes (de casta le viene al galgo) y estancias por África y Asia. Hay que resaltar en su obra el uso de materiales (papel, tintas, acrílicos…) que indican un agudo sentido del refinamiento. Impresionan las fotos de esos personajes asiáticos que abandonando las vanidades del mundo (“menosprecio de corte y alabanza de aldea” ¡Ay Fray Luis de León!) van pidiendo limosna (como nuestro Fray Leopoldo de Alpandeire por las calles de Granada) y  presencian serenamente como las aguas del Ganges - sin Caronte y sin barca - transportan las cenizas y ¡quién sabe si las almas! de los seres humanos. No se piense que la obra de Chávarri se ha desarrollado siempre por los cauces de los actuales soportes ya que somos testigos de trabajos más formalistas y clásicos. Pero como los caminos del arte son aquellos por los que conduce la vida el rumbo que, en el momento presente, señala la brújula de este vitalista navegante del arte de nuestro tiempo es el que se nos mostró al sur de Hispania, en la Comarca del Estrecho, en Sotogrande, en San Roque (Cádiz). No el Sotogrande de la “presse du coeur”sino el Sotogrande del gran artista que fue Fernando Zóbel. Como este conciso texto pretende ser más literario que crítico casi resulta obligado cerrarlo con los versos de un poeta:

No te detengas nunca.
Si ves muros de agua
anchos fosos de aire
setos de piedra o tiempo
guardia de voces ¡pasa!

Pedro Salinas,  Razón de amor

No hay comentarios :

Publicar un comentario